martes, 31 de enero de 2017

Pasa la vida

Estaba haciendo la cena y a la vez escuchando en  8TV  la conversación entre Pilar Rahola y Josep Cuní en el programa  “8 al día”. Inconscientemente cambié de canal de televisión. Continué  removiendo la sartén, pero el ruido del extractor hizo darme cuenta que Pilar Rahola y yo  habíamos partido hacia destinos diferents.

Desde principios de los años noventa escucho y sigo a Pilar Rahola en radio, televisión o periódicos. He coincidido casi siempre con sus opiniones. Era una mujer independiente y luchadora, a quien no lo importaba expresar sus ideas aunque fuera a contracorriente. Atención al tiempo verbal que en esta ocasión sí he utilizado correctamente: “Era” .

En aquellos años yo estudiaba unas oposiciones y aprovechaba para hacer que la pausa del desayuno coincidiera con el programa de Josep Cuní a “La mañana de Josep Cuní"cuando Pilar Rahola era la invitada. En aquella época me impactaron sus advertencias y premoniciones de lo que pasaría en los Balcanes. Ella siempre ha continuado luchando por sus ideas y por la gente que ella creía que había que defender. Últimamente pero, ella defiende los poderosos y estoy desconcertada.  A pesar que muchas personas la criticaban antes y ahora también y, como aquel enamorado al que no le importan las estupideces que dice su pareja, continué defendiéndola con la convicción de que todo el mundo tiene derecho a equivocarse alguna vez. Llegué a pensar que quizás era yo la que tenía que revisar mis opiniones.

Hasta el mes de agosto del año pasado, cuando Pilar Rahola colgó en las redes sociales una desafortunada foto de nuestro President tocando la guitarra en su casa. Ella quería presumir de Presidente como una adolescente en  Instagram.  Pero lo estropeó todo, según mi opinión. No lo pude evitar y juro que lo intenté: Pilar Rahola cayó en picado en el limbo imaginario en el que yo la tenía colocada. Alguna fibra se rompió dentro de mí (literalmente) cuando vi que se doblegaba al poder político y policial (  salía también en la foto el jefe de los Mossos d'esquadra). Una periodista tiene que ser independiente, nunca tiene que estar aliada con el poder y riendole las gracias. Tiene que estar al oro lado,  para vigilar y denunciar los excesos.

 Y ya para rematarme, Pilar,  va y entrevistas en  TV3 a la mujer de nuestro President,  Marcela Toppor. Qué te ha hecho la familia Puigdemont ? De entre las muchas preguntas a realizar a una mujer inteligente y preparada como la Toppor no había nada más interesante que preguntarle que por la hora de las relaciones sexuales con el President? Donde queda la incorruptible periodista que denunciaba el genocidio de los Balcanes?

Maria Teresa Campos también me ha decepcionado. En los años noventa dirigía y presentaba por las tardes un programa de entretenimiento en  TVE que se llamaba “Pasa la vida". En el horario que yo me había marcado de estudio de las oposiciones para merendar,  miraba un rato el programa. Maria Teresa era y es todavía una gran entrevistadora: tenía un profundo respeto para la persona que tenía delante ( tiempo verbal correcto:”tenía”). En "Pasa la vida", el entrevistado, ya fuera actor, cantante o político, marchaba del programa con la sensación que había dado la mejor imagen de sí mismo. Dio la oportunidad a muchos periodistas que empezaban y que ahora son famosos.  A aquella hora de la tarde venía muy bien ver un programa tranquilo y distendido con su voz cálida.

¿Qué pasó con Maria Teresa Campos para convertirse en la caricatura de sí misma que es ahora? Pues que desembarcó en España  Paolo Vasile  y Tele 5. No descubro nada ya lo sé. Vasile empezó a pervertir a tantos y tantos buenos periodistas, entre ellos a Maria Teresa Campos. Le ofreció un programa similar a ¨Pasa la vida". Ella aceptó pero no tenía suficiente audiencia. Hay una entrevista  de aquellos años a Belen Esteban y que de vez en cuando la repiten en los zappings ( para comprobar el cambio físico de la Esteban, no de la Campos). Justo en aquel momento Vasile destruyó a la periodista Teresa Campos y la convirtió, cual Pigmalión, en una estrella a Tele 5. La oferta económica debía de ser difícil de rechazar.  Teresa Campos perdió muchas cosas con el intercambio : entre ellas el prestigio. Lanzó por la borda la oportunidad de ser  una “ Jesús Hermida” en versión femenina para convertirse en una Kardashian. Actualmente está haciendo el ridículo  más espantoso con un reallity mostrando las intimidades absurdas de su familia. ¿ Por qué?

 Todo tiene una explicación en esta vida, y en la revista Hola se pueden encontrar muchas respuestas. Vi unas impresionantes fotografías del zapatero de su immensa casa y lo entendí todo. María Teresa quiere un estatus social alto puesto que el profesional sabe que lo ha perdido en los despachos de los directivos de Tele 5. Necesita mucho dinero para mantenerlo: el estatus y la casa. Al zapatero fue a parar el prestigio de una gran periodista. Muy triste.

La edad ha hecho cambiar a estas dos periodistas a peor, según mi opinión. Yo me pregunto, ¿ en que habré cambiado yo de la chica que estudiaba las oposiciones a principios de los noventa? En unos cuántos kilos más evidentemente. Tanto desayuno y merienda....
"Todos los hombres del Presidente".